Por
José Yorg, el cooperario.
Ante la desintegración social y económica que atraviesa a toda la sociedad por medio de medidas políticas del gobierno nacional pudiéramos denominarlo “gobierno nacional de disolución de la nación argentina” se hace imperativo formular la consigna de “Sociedad desarticulada o Comunidad organizada” He aquí el dilema del pueblo.
El artículo de Daniel Santa Cruz redactado para el
periódico LA NACION nos sirve como disparador de un análisis necesario y
urgente, sobre todo cuando el periodista afirma que “La educación pública debería estar en el Pacto de Mayo, en la agenda prioritaria
del actual gobierno y de cualquier otro”.
Señaló que “El Presidente y su ejército de libertarios se subieron sobre el
fracaso del populismo kirchnerista y lo utilizan como excusa para terminar de
romper la única herramienta de igualdad y posibilidades de futuro que le queda
a un país casi devastado”.
Otra de las argucias utilizadas por el
gobierno nacional consiste en promover directamente el enfrentamiento entre
“padres tóxicos” y las maestras y profesores. ¿Qué pretenden con esa actitud
negativa en vez de promocionar el entendimiento? Instaurar una sociedad desarticulada,
enfrentada, egoísta, individualista y mezquina.
Por el contrario, la pedagogía
cooperaria promueve la solidaridad social, la fraternidad y el esfuerzo propio
y la ayuda mutua. Estas cualidades educativas del cooperativismo escolar lo
entendió muy bien Perón y en base a ello el cooperativismo formó parte esencial
del Segundo Plan Quinquenal.
También entendió sobradamente bien Perón
que para construir en el seno de la nación argentina una Comunidad organizada
requería de una educación que promoviera valores y principios de reciprocidad
social.
Leer sobre ese pensamiento y acción
política de Perón aún hoy emociona, veamos:
El Segundo Plan
Quinquenal (IV. G. 14 y IV. E. 8) referente a cooperativas escolares determinan
la “difusión de los principios del
cooperativismo y constitución de cooperativas escolares y estudiantiles serán
auspiciadas por el Estado a fin de contribuir a la formación de la conciencia
nacional cooperativista y prestar servicios útiles a los alumnos”. “Y en el
quinquenio 1953/ 57 se desarrollará una activa campaña para lograr en 1957 la
existencia de cooperativas escolares o estudiantiles en todos los establecimientos
educacionales del Estado”. “Se creó la
Comisión nacional de cooperativas escolares”.
Por tales razones,
nosotros, docentes cooperativos, nos asumimos continuadores de la educación
cooperativa escolar del Segundo Plan Quinquenal porque en ese plan se amalgamó
la doctrina peronista y la doctrina cooperativa como la forma de realización de
la solidaridad social, base de la doctrina nacional de justicia social.
Ante la desintegración
social y económica que atraviesa a toda la sociedad por medio de medidas
políticas del gobierno nacional pudiéramos denominarlo “gobierno nacional de
disolución de la nación argentina” se hace imperativo formular la consigna de “Sociedad
desarticulada o Comunidad organizada” He aquí el dilema del pueblo.
Así que tengo la más
plena convicción de que es hora de pensar en reconstruir las políticas de Perón
sobre el cooperativismo escolar como elemento sustantivo para alcanzar calidad
educativa y construir la Comunidad organizada y fraterna.
Es preciso recalcar con absoluta precisión que nosotros
somos cuadros educativos de la Provincia de Formosa especializados en el área
de la investigación pedagógica que abarca las políticas y programas
socio-educativas y cooperativismo escolar y universitario, así que afirmamos que
en tiempos de dramática crisis civilizatoria la educación es un eje fundamental
de las políticas públicas que debe preservarse.
¡En la fraternidad, un abrazo cooperativo!