“Es posible constatar que los Estados tienen en el
sistema cooperativo un aliado estratégico potente en la lucha contra la
pobreza, tal como lo hizo Perón”.
El educador social, José Yorg, fijó que “es perentorio desmitificar-una vez
más de las tantas-que la pobreza es una condición humana desde los tiempos
inmemoriales, puesto que es consecuencia directa de decisiones políticas que se
toman desde los Estados, y que generan entornos difíciles para grandes francas de
individuos, y en razón a que ella, la
pobreza, se produce y reproduce en el marco de las relaciones sociales injustas
derivadas de la influencia del Estado y
el mercado”.
Consideró
Yorg que “dicho lo anterior, resulta oportuna y conducente, entonces, examinar
esta problemática desde la política
económica , toda vez que, lo repito, la pobreza es resultado de decisiones
políticas que influyen en la economía de las familias”.
“Así
las políticas publicas infectadas de neoliberalismo cuyos resultados de la implementación de este
modelo están a la vista de todos: más del 40% de la población argentina vive en condiciones de pobreza y
miseria”, indicó.
Política peronista.
Yorg aseveró
que “A la luz de la ciencia política económica o economía política, para el
caso procede, consignar con claridad que el conflicto social es hijo de las injustas
decisiones políticas, puesto que impiden, frenan y frustran el desarrollo
humano, he allí la comprensión y descubrimiento a la que arribaron los profetas
de la cooperación iluminados por la
ciencia y la doctrina en el Siglo XIX”.
“En otras palabras-prosiguió-es
posible constatar que los Estados tienen en el sistema cooperativo un aliado
estratégico potente en la lucha contra la pobreza, tal como lo hizo Perón al
establecerlo en el 2° Plan Quinquenal,
demostrado ampliamente que el
cooperativismo no avala la pobreza, lo resuelve humana y peronistamente”.
“En
síntesis, desmontar falsedades arraigadas, producto de la ignorancia supina o
peor aún, de pensamientos interesados que promueven que la pobreza no es
posible erradicar. Popularmente se afirma que el dinero que falta para comer,
vestirse, levantar tu propio rancho, tu educación, tu remedio, etc., ese dinero
que falta en tu bolsillo, está en el bolsillo de alguien, pero seguro que no de
algún peón de estancia, simple ecuación”, concluyó el experto en Economía Social.
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