Por
José Yorg, el cooperario.
"El peor analfabeto es el analfabeto político. No
oye, no habla, no participa de los acontecimientos políticos. No sabe que el
costo de la vida, el precio de los garbanzos, del pan, de la harina, del
vestido, del zapato y de los remedios, dependen de decisiones políticas. El
analfabeto político es tan burro que se enorgullece y ensancha el pecho diciendo
que odia la política. No sabe que de su ignorancia política nace la prostituta,
el menor abandonado y el peor de todos los bandidos es el político corrupto, mequetrefe
y lacayo de las empresas nacionales y multinacionales".Bertolt Brecht
Partimos de una verdad histórica incontrastable: El surgimiento del cooperativismo es una consecuencia, es una reacción, es un efecto de una causa negativa para el pueblo, de un modelo socio-económico injusto y cruel para los laburantes, denominado capitalismo.
La lucha por una sociedad mejor, humanista
y con una auténtica democracia es una lucha necesariamente política e
ideológica, y por tanto, incluye a la
lucha política e ideológica del cooperativismo que, al igual que otras
expresiones políticas y sociales, deberá recuperar su esencia para luego
cumplir su rol transformador.
Si, en efecto, existen cooperativas que se
desempeñan sin los valores y principios cooperativos, se comportan como
empresas que explotan a sus propios miembros, imitan groseramente los
parámetros administrativos y de gestión competitivos que las empresas de
capitán para deshonra del noble cooperativismo”.
Lo anterior se explica- pero no se
absuelve de culpa y cargo-porque en medio de la contienda política-ideológica
global, mundial, el cooperativismo, al igual que otras corrientes sociales y
partidos políticos fueron colonizados, infiltrados, y desvirtuados en sus
doctrinas e idearios en mayor o menor medida, como parte de la derrota cultural
que propinó el neoliberalismo.
Y porque además los sectores de poder
utilizan un modelo económico y financiero para la precarización del trabajo, de
la salud, de la producción del pueblo, utilizan la inflación, y lo más nefasto,
el pago de la deuda ilegal para subyugar
al pueblo, así incrementan sus fabulosas
ganancias.
Interpuestos ante una encrucijada de
Cooperativismo o barbarie, la lucha política del cooperativismo es una lucha
noble y bondadosa porque sus propósitos implican la construcción de un mundo
del buen vivir.
El movimiento cooperativo, que es un
movimiento socio-económico transformador, no puede permanecer impávido ante el
infortunio del pueblo, por ello repetimos mil veces: La cooperación organizada
debe contribuir para que se comprenda de una vez por todas que estamos ante la
encrucijada de Cooperativismo o barbarie.
¡En
la fraternidad, un abrazo cooperativo
No hay comentarios:
Publicar un comentario